9 de febrero

 

El culto que me dan está vacío, porque la doctrina que enseñan son preceptos humanos(Mc 7, 7)

 

El evangelio de Marcos nos permite percibir como la actividad misionera de Jesús desde sus inicios causa gran controversia entre las autoridades religiosas de su tiempo. Esto en gran medida por querer dar a través de sus enseñanzas, un nuevo sentido a tradiciones muy queridas para los judíos como el ayuno, la limpieza ritual tal como lo muestra el evangelio de este día. Los judíos y entre ellos, los fariseos,  acostumbraban lavarse las manos antes de comer los alimentos de manera rigurosa. Sin embargo, la forma como vivían sus tradiciones eran vacías porque se quedaban solo en un culto externo que no ponía en práctica aquello que predicaban, sino que buscaban más sus propios intereses. De allí que Jesús los enfrente con fuerza y les haga ver su falta de caridad hacia los demás. Como los fariseos nosotros también podemos caer en la tentación de vivir nuestras tradiciones religiosas más por costumbre que como un medio que nos una a Dios y a nuestros hermanos. Pidamos al Señor, en este día, que nos conceda la gracia de vivir sus enseñanzas como un medio para amar y servir mejor a los demás.

 

Reflexionemos:

¿Somos rigurosos con nuestras prácticas religiosas?, ¿llevamos a la vida de cada día aquello que creemos y celebramos en nuestra vida de fe?

 

Oremos:

Ayúdanos, Señor, a no caer en un ritualismo vacío y alejado de las necesidades de quienes están a nuestro alrededor. Que iluminados por tu Palabra, podamos llevar con fe a la vida de cada día, tus enseñanzas. Amén.

 

Recordemos:

Dios nos invita a hacer vida sus enseñanzas en cada una de las realidades que vivimos a diario.

 

Actuemos:

Pidamos perdón al Señor en este día por las veces en que nuestras prácticas religiosas son vacías y alejadas de las necesidades de los demás.

 

Profundicemos:

La vida de los santos nos enseña la importancia de llevar a la práctica las enseñanzas del evangelio como una forma de testimoniar todo el bien que recibimos a diario de Dios (Libro: Los santos de cada día).

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

¿Requiere asesoria? Activar chat

×