“Hoy se ha cumplido esta escritura ”
(Lucas 4, 14 – 22a)
Permitamos que la Palabra de Dios toque nuestra vida
Con la fuerza del Espíritu Santo, Jesús inicia su ministerio en Galilea. Se presenta como el cumplimiento de la promesa para el pueblo de Israel. Él es la Palabra de gracia que trae la bendición de Dios. Esta Palabra de Dios, halla su cumplimiento en quienes la escuchan y creen. Así como para los paisanos de Jesús ese día se cumplió la profecía de Isaías, para nosotros este evangelio actualiza el actuar de Dios en nuestras vidas. Hoy esta Palabra de Dios se cumple en cada uno de nosotros. Jesús como lo dice el texto, proclamó el año de gracia del Señor. Nosotros el 25 de diciembre de 2024, iniciamos el año de gracia del Señor, “el Jubileo de la Esperanza”, proclamado por el papa Francisco. Un paso especial del Señor por nuestras vidas, en el que vamos a ser convertidos, liberados, sanados, perdonados, y sobre todo, será renovada nuestra esperanza para transmitirla a quienes nos rodean.
Reflexionemos: Jesús inició su ministerio con la fuerza del Espíritu Santo. Lleno de este Espíritu entró en la sinagoga y proclamó el año de gracia del Señor, actualizó el hoy de Dios en la vida de su gente.
Oremos: Gracias Señor, por este año de gracia y misericordia que estamos viviendo como Iglesia. Ábreme a la acción de tu Santo Espíritu para ser peregrino de la esperanza. Amén.
Actuemos: Hoy voy a sacar un espacio de tiempo físico para buscar en las redes, en que consiste el Jubileo de la Esperanza, este año de gracia que estamos viviendo, para aprender, acoger, vivir y dar a conocer.
Recordemos: “El Espíritu del Señor esta sobre mi porque él me ha ungido”.
Profundicemos: Jesús inicia su ministerio bajo la acción del Espíritu Santo, en medio de su pueblo, con su gente, y en la sinagoga de Nazaret, en la que proclama el año de Gracia del Señor.
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