“La verdad los hará libres” (Jn 8, 32)
Muchas veces creemos que la verdadera libertad radica en la independencia que tenemos o no, para actuar y hacer lo que queramos. Sin embargo, Jesús en el evangelio de hoy, nos lleva a mirar que la libertad va mucho más allá de eso, pues parte de la conciencia con la que actuamos en la vida, es decir, del referente que mueve nuestras decisiones y relacionamientos. Jesús nos enseña que dicho referente es su Palabra y que el permanecer fieles a ella, nos llevara a conocer la verdad y lo mejor de todo, a ser libres: “Si se mantienen fieles a mis palabras, serán de veras discípulos míos, y conocerán la verdad y la verdad los hará libres”. La libertad para Jesús, es la capacidad que tenemos de iluminar la vida de cada día desde su Palabra, para no ser presas del pecado, del egoísmo, del encerrarnos en los propios intereses, del creernos mejores y por tanto, autosuficientes. La libertad que Jesús nos ofrece, nos lleva a reconocer a Dios como Padre, a él como su hijo, y a quienes nos rodean, como hermanos con quienes podemos compartir lo mejor que tenemos: nuestra propia existencia. Pidamos al Señor, en este día, que nos ayude a esforzarnos por vivir la verdadera libertad que nos lleva ante todo a sentirnos necesitados de Dios.
Actitud: Libertad.
Reflexionemos:
¿Qué intereses mueven nuestra existencia?, ¿cómo podemos vivir la libertad que nos propone Jesús?
Oremos:
Danos, Señor, un corazón libre, capaz de reconocer en tus enseñanzas un camino para superar nuestros egoísmos, sacar lo mejor de nosotros mismos y compartir gratuitamente aquello que somos y tenemos, con los demás. Amén.
Recordemos:
El pecado nos esclaviza en nuestros propios intereses y egoísmos.
Actuemos:
Presentemos al Señor, en la oración de esta jornada, aquellos intereses personales que nos esclavizan y nos encierran en nosotros mismos.
Profundicemos:
Amar es la mejor manera para aprender a salir de nuestro propio mundo y ensanchar nuestro corazón a las necesidades de los demás. Amar implica ante todo dejar de lado los egoísmos y compartir con gratuidad (Libro: Un corazón libre).