Origen de Jesús el Mesías, hijo de David, hijo de Abrahán
(Mateo 1, 1-17)
Permitamos que la Palabra de Dios toque nuestra vida
Hoy el Evangelio nos lleva a contemplar los orígenes de Jesús dentro de la historia. Y leer su genealogía nos permite contemplar que ella se va tejiendo de muchas generaciones, con personas diversas que también tienen una historia cargada de aciertos y desaciertos, como toda historia humana, movida por una promesa, llena de esperanza, de gracia y de pecado. Historia que está ligada al pueblo de Israel y que luego se abrirá a toda la historia humana. Porque con el nacimiento del Mesías, Dios hace del género humano una sola familia, donde Jesús – nuestro hermano mayor asumiendo nuestra carne paga el precio de nuestra salvación.
Reflexionemos: ¿Se reconocer el amor de Dios en mi vida personal y en los otros cuando fallo sin condenar por el pecado?
Oremos: Te doy gracias Señor porque desde siempre me has amado y cuidas de mí a pesar de mi pecado. Amén.
Recordemos: Dios camina y hace historia con nosotros, solo debemos agudizar el corazón y los sentidos para descubrir su paso.
Actuemos: Hoy seré más consciente del amor del Señor en mi vida, porque conociendo mi fragilidad, sabe esperar mi regreso para abrazarme como buen Padre.
Profundicemos: “Dios mío, confía tu juicio al rey, tu justicia al hijo de reyes, para que rija a tu pueblo con justicia, a tus humildes con rectitud” (Sal. 71)
Te invitamos a profundizar La Palabra de Dios con el Misal popular .