Jueves Santo de la Cena del Señor
«Los amó hasta el extremo»
(Juan 13, 1-15)
Permitamos que la Palabra del Señor toque nuestra vida
Hermanos es jueves santo, iniciamos en esta tarde el triduo pascual del señor con la celebración de la ultima cena vivida por Jesús y sus discípulos, durante la cual Jesús siendo consiente de ser el señor de la historia y que había llegado su hora para volver al padre, instituyo los sacramentos de la eucaristía y del sacerdocio y nos dejo el mandamiento del amor como testamento para perpetuar su presencia en este mundo.
San Juan en el evangelio de hoy no narra la institución de la eucaristía como hacen los otros evangelistas, sino como el es protagonista de los hechos, nos permite ver como Jesús después de la cena se levanto de la mesa se puso un delantal de ciervo y lavo los pies de sus discípulos, con esta preciosa escena Juan nos deja comprender el significado profundo de la eucaristía y de la presencia salvadora de Jesús en el mundo: amar, servir, dar la vida hasta la muerte: son estas las actitudes que constituyen la esencia misma de nuestra vida cristiana.
Reflexionemos:
vivamos este Jueves Santo con profunda gratitud al señor por los dones incomparables que nos ha dejado en herencia, vivámosla reconociéndonos hermanos y reconciliándonos entre nosotros para recibir en abundancia los efectos salvadores de la pasión, muerte y resurrección del Señor. Gracias Jesús por amarnos tan entrañablemente hasta el extremo.
Oremos:
Señor Jesús, te suplico que me concedas tu ayuda para que nunca te separes de mi. Tú eres mi única fortaleza, pues todo lo puedes. Ayúdame a no tener miedo frente a las dificultades porque siempre estás conmigo. Que la Eucaristía, pan de vida eterna y sacramento de salvación, sea el medio por el que me fortalezca espiritualmente. Amén
Recordemos:
Sabiendo Jesús que el señor le había dado todo poder y que habiendo venido de Dios a Dios volvía, se levanto de la mesa, se quito el manto, y se puso una toalla alrededor de la cintura. Echo agua en una palangana y empezó a lavarles los pies a los discípulos y a secárselos con la toalla.
Actuemos:
Meditare y orare junto a la palabra, que ese descubrir al leer cada capitulo y versículo , lo pueda aplicar en mi vida.
Profundicemos:
Con Jesús se cumple una nueva alianza entre Dios y los hombres. Jesús, en su muerte y resurrección, nos abre el sendero hacia Dios Padre.