“Se acerca su liberación”
(Lc 21, 28)
Permitamos que la Palabra de Dios toque nuestra vida
El evangelio de este día, si bien está marcado por signos de destrucción, muerte, angustia y desolación nos ayuda a reconocer como después de la tormenta llega la calma. Jesús habla a sus discípulos sobre el caos que el sitio y la destrucción de la ciudad de Jerusalén, que tendrá lugar años después de su muerte, para denotar que muchas veces en la vida, es necesario pasar por momentos de crisis, dolor, confrontación y purificación para dar paso a un nuevo tiempo que traiga paz y liberación: “Levántense, alcen la cabeza: se acerca su liberación”. Liberación que solo es posible cuando acogemos su presencia resucitada en nuestra vida. Pidamos al Señor, en este día la gracia de aprender a reconocer en las crisis y las dificultades que vivimos, la oportunidad de crecer, refirmar nuestros valores y ser personas más libres, y valientes.
Reflexionemos: ¿Qué momentos de crisis nos han enseñado a ser más libres?, ¿qué enseñanza nos deja el evangelio de hoy?
Oremos: Ayúdanos, Señor, a reconocer que solo en ti, encontramos la paz, la libertad y la vida plena que tanto anhela nuestro corazón. Amén.
Recordemos: Es necesario pasar por momentos de crisis y sufrimiento para purificar las verdaderas intenciones de nuestro corazón.
Actuemos: Revisemos nuestra vida y agradezcamos al Señor por los momentos de crisis que nos han ayudado a crecer y ser más libres.
Profundicemos: Los momentos de crisis vividos con fe nos ayudan a crecer y ser personas más libres y audaces (Libro: Más allá del límite).