20 de octubre

 

“Les aseguro que lo pondrá al frente de todos sus bienes” (Lc 12, 44)

 

En el evangelio de este día, Jesús nos recuerda de nuevo la importancia de ser personas precavidas y prudentes, no solo en los proyectos que emprendemos a nivel personal, familiar o laboral, sino también en nuestra experiencia de fe: “¿Quién es el administrador fiel y solícito a quien el amo ha puesto al frente de su servidumbre para que les reparta la ración a sus horas?”. Actitudes que exigen de nosotros, un corazón atento y humilde, para reconocer cuáles son los verdaderos intereses que nos mueven por dentro y la autenticidad con la que vivimos o no, las enseñanzas de Jesús. Pidamos al Señor, en este día que nos ayude aprovechar al máximo todos los dones y capacidades que hemos recibido de él y orientarlas mucho más, al servicio del Reino.

 

Reflexionemos:

¿Vivimos con autenticidad las enseñanzas de Jesús?, ¿administramos con fidelidad las capacidades que hemos recibido de Dios?

 

Oremos:

Gracias, Señor, por los dones y capacidades que a lo largo de nuestra vida hemos recibido de ti. Ayúdanos administrarlos con prudencia y fidelidad, orientándolos siempre al servicio de nuestros hermanos. Amén.

 

Recordemos:

Somos siervos fieles y prudentes en la medida en que ponemos al servicio de los demás nuestras capacidades.

 

Actuemos:

Revisemos en esta jornada la manera como administramos nuestra vida y ponemos al servicio de los demás, las capacidades que tenemos.

 

Profundicemos:

Ser personas prudentes y precavidas nos lleva a vivir cada realidad de nuestra existencia de la mano de Dios  (Libro: Desde el manantial).

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

¿Requiere asesoria? Activar chat