
El anuncio del ángel a María se da con una invitación a la alegría, la alegría profunda de saber que el Señor está con ella, y por tanto no hay porque tener miedo. En este breve diálogo entre el ángel y María tenemos el “Sí” de María, que es un regalo para toda la humanidad, porque gracias a su fe, a su capacidad de escucha, a su generosidad y disponibilidad, se da el misterio de la encarnación, del Dios con nosotros. Estamos entonces ante María, mujer creyente, que supo acoger en su seno al Hijo de Dios, que contribuyó, con sus cuidados maternos, en su crianza, y crecimiento. Su humildad, la hizo descubrir la grandeza de Dios. Fue su “Hágase en mi según tu Palabra” que posibilitó la encarnación de Jesús. Y esto no lo debemos olvidar en este día especial en que como Iglesia celebramos la fiesta de la Inmaculada da Concepción, dogma que fue proclamado por el Papa Pío IX un 8 de diciembre de 1854; y como nos dice José María Castillo: “Ella nos enseña lo más ejemplar y digno de la condición humana”. De igual manera, el beato Santiago Alberione afirma: “la humanidad sabe lo que debe a la mujer, basta mirar a María”.
El anuncio del ángel a María, está cargado de esperanza, ¿pedimos a nuestra madre María, que en medio de todo lo que vivimos a nivel personal, familiar y social, recordemos que Jesús está con nosotros?
Señor, Jesús, como María yo también quiero decir "sí" en este día a tu presencia y a cada uno de tus proyectos. Hágase en mí como tú quieres. Dame la fuerza necesaria para vivir con radicalidad, fidelidad y valentía cada una de tus enseñanzas. Amén
Si Dios está con nosotros, no habrá cabida para el miedo. María nos antecedió con su ejemplo de fe y esperanza. Acudamos a ella como madre de Dios y madre nuestra, ella es quien nos puede hacer llegar a Jesús.


