“No lleven bolsa, ni alforja, ni sandalias; y no saluden a nadie por el camino” (Lc 10, 4)
En este día en que celebramos la fiesta de san Lucas evangelista, el evangelio nos invita a renovar el llamado que Jesús nos hace para seguirlo: “Designó el Señor otros setenta y dos y los mandó delante de Él, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir Él”. Llamado que nos invita a ser continuadores de las enseñanzas de Jesús en los diferentes ambientes en los que vivimos y a confiar, en que Dios nos concede lo necesario para anunciarlo: “¡Pónganse en camino! Miren que los envío como corderos en medio de lobos. No lleven bolsa, ni alforja, ni sandalias”. Pidamos al Señor, en este día la gracia de aprender a ser como san Lucas, portadores de la Buena Nueva para todos los que nos rodean y anunciar con nuestra vida, el amor y la predilección que Jesús tiene hacia la humanidad.
Reflexionemos:
¿Somos buena noticia para los demás?, ¿cómo podemos testimoniar mucho más las enseñanzas del Evangelio?
Oremos:
Ayúdanos, Señor, a llevar cada vez tu Palabra a nuestra vida y testimoniar aquello que tu amor obra en nosotros. A ser continuadores de tu misión en los diferentes ambientes en los que transcurre nuestra existencia. Amén.
Recordemos:
Como bautizados estamos llamados a ser Buena Noticia para los demás.
Actuemos:
Revisemos en esta jornada nuestra vida y miremos que tanto somos o no, Buena Noticia para quienes nos rodean.
Profundicemos:
La mejor manera de ser portadores del Evangelio, es profundizar mucho más su significado y dejar que él, nos transforme cada día (Libro: Agenda litúrgica 2022).